Fumar tabaco está relacionado con más del 80% de todos los casos de cáncer de pulmón, pero las personas que nunca han fumado o las que han estado expuestas al tabaquismo pasivo también pueden desarrollar cáncer de pulmón.
Otras causas son:
Exposición a la contaminación atmosférica (incluidos los gases de escape de los vehículos diesel)
Exposición en el trabajo o durante las aficiones al amianto, polvo de madera, humos de soldadura, arsénico o metales industriales (por ejemplo, berilio y cromo).
Exposición a la contaminación del aire en interiores (por ejemplo, radón o humo de carbón).
Puede haber otras causas, y probablemente se descubran más en el futuro. Las personas que padecen las siguientes enfermedades también tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de pulmón:
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y enfisema
- Fibrosis pulmonar
- Cáncer de cabeza y cuello, y de esófago (comparten los mismos factores de riesgo, como el tabaquismo)
- Linfoma o cáncer de mama (tratados con radioterapia torácica)
- Receptores de trasplante pulmonar
- Los genes también pueden influir en algunos cánceres de pulmón. Si hay antecedentes de cáncer de pulmón en tu familia, podrías tener más probabilidades de desarrollar la enfermedad, pero esto no es igual para todos.